Filosofía Teresiana

Principios Filosóficos

La Filosofía del Colegio Teresiano Nuestra Señora de la Candelaria se fundamenta básicamente en el Magisterio de la Iglesia Católica y en las enseñanzas de ENRIQUE DE OSSÓ quien se inspiró en la espiritualidad de Santa Teresa de Jesús. La escuela Teresiana es y realiza una misión de Iglesia. Su ideal educativo es formar a Cristo Jesús en el corazón de las niñas, niños y jóvenes y conseguir que Jesús sea un amigo y compañero permanente en su vida cotidiana.

Promueve la educación Integral de los estudiantes según la concepción católica de la persona haciendo énfasis en cuatro dimensiones: Relacional, volitiva, cognitiva y de trascendencia. “La Educación Teresiana se desarrolla desde un trato recíproco que reconoce la dignidad de todo ser humano y promueve la amistad”. PET (Propuesta Educativa Teresiana)

Modelo de Desarrollo

PEI
PROYECTO EDUCATIVO INSTITUCIONAL
“Primero la persona”

El proyecto educativo institucional se encuentra organizado por cuatro componentes: Gestión directiva, Gestión académica, Gestión administrativa financiera, y Gestión a la comunidad. Cada componente presentan diferentes líneas de acción que busca a través de un modelo de Educación humanizadora y transformadora, brindar a los estudiantes en un Proceso Educativo integral e integrador, que las estudiantes alcancen el máximo desarrollo de sus dimensiones antropológicas: relacional, volitiva, cognitiva y de trascendencia, para la construcción de su proyecto de vida personal, profesional y laboral, con miras hacia una sociedad más justa y equitativa.

La evolución del potencial natural (aptitud) a través de diferentes experiencias de aprendizaje en el entorno familiar, social y educativo. En otras palabras, es una capacidad desarrollada por medio de un conjunto de procedimientos, estrategias y medios intencionados, lo que permitirá autoevaluar el desempeño con el fin de introducir las modificaciones pertinentes. El conjunto de habilidades movilizadas de manera eficaz dan lugar a las competencias.
El dominio de una práctica en contexto, sustentada por el desarrollo integrado de habilidades prácticas, conocimientos teóricos, valores éticos, actitudes y rasgos de personalidad que permiten resolver situaciones diversas de manera integrada, ética y eficaz.

Metas Educativas

Desde los fundamentos pedagógicos transmitidos por nuestro fundador San Enrique de Ossó, el Colegio Teresiano Nuestra Señora de la Candelaria hace opción por una educación humanizadora, liberadora y transformadora teniendo en cuenta la realidad y el contexto social, desde:
  • Una educación por competencias, el desarrollo del pensamiento crítico, sistémico y reflexivo, el trabajo por comunidades de aprendizaje.
  • El desarrollo de competencias específicas en la media técnica que fortalezcan su formación para los retos del medio actual y su continuidad en la formación profesional.
  • La vivencia de experiencias profundas de acuerdo al itinerario Teresiano que favorezcan el encuentro con Dios y el desarrollo de los procesos de la dimensión de trascendencia: interioridad, conocimiento propio, silencio, trato de amistad.
  • La educación de habilidades para la convivencia y la valoración de las diferencias que ayuden a la convivencia pacífica en sociedades plurales.
  • El desarrollo de la cultura y el deporte con los cuales se pretende desarrollar y vivir los valores que favorecen la educación para la vida, la cooperación y la trasformación social.
  • El desarrollo de la búsqueda de la justicia, la paz, la solidaridad, el cuidado de la vida, la equidad de género, el lenguaje inclusivo y la sustentabilidad del medio ambiente.
Componente constitutivo de la persona, integrado por un conjunto de capacidades mentales, susceptibles de modificación y aprendizaje, que la habilitan para la solución de problemas vinculados a los contextos y para la comprensión del cosmos, las personas, Dios y su propia realidad. Sus procesos de desarrollo son: Procesos Cognitivos Básicos, Procesos de Razonamiento, Procesos de Comprensión y solución de Problemas.
Componente constitutivo de la persona que le capacita para entrar en relación con los otros, con su entorno, consigo misma y con Dios, constituyéndose como un YO personal, capaz de encuentro, reciprocidad y donación. Sus procesos de desarrollo son: Relación Consigo Mismo, Relación con “el otro”, Relación con “lo otro”, Relación con Dios.
Componente constitutivo de la persona que le permite, desde una relación de amor, abrirse al misterio de Dios y vivenciar su acontecer en la vida personal, en los demás y en el mundo que le rodea. Sus procesos de desarrollo son: Interiorización, Conocimiento Propio, Oración, Misión.
Componente constitutivo de la persona que le permite motivarse, decidir y actuar en un contexto, conjugando conocimientos, emociones, valores y principios en interacción consigo misma, con los demás, con el entorno. Sus procesos de desarrollo son: Motivación, Toma de Decisiones, Praxis.

Horizonte Institucional

Misión

Somos una comunidad inspirada en el carisma Teresiano de San Enrique de Ossó, que fomenta una educación
humanizadora, liberadora y de transformación social, la cual promueve un proceso educativo incluyente y dialógico, a través de la implementación de pedagogías activas que fortalecen las dimensiones del ser humano.

Visión

El Colegio Teresiano Nuestra Señora de la Candelaria siendo parte de la  red de colegios teresianos, en el año 2028
brindará a la comunidad educativa diferentes escenarios y experiencias que desarrollan el liderazgo compartido, capacidad de investigación, innovación y emprendimiento; permitiendo la formación de seres humanos autónomos
y conscientes de su rol ciudadano, con el cual puedan responder a las diferentes realidades sociales y laborales.

Valores

Camino de crecimiento interior a partir del ENCUENTRO consigo mismo/a, los demás, el cosmos y con Dios, hasta lograr reflejar la imagen de Jesucristo.
Talante personal que orienta las propias capacidades al SERVICIO de los demás, desde una actitud positiva y creativa en toda situación o frente a la palabra dada.
Cualidad permanente de la CONVIVENCIA, valoración de la diferencia y resultado de la adhesión a los acuerdos establecidos en Comunidad.
Principio para desarrollar una CONCIENCIA REFLEXIVA Y CRITICA en cada situación, conflicto o decisión, en pro de un ambiente más humano y dentro del marco de los derechos, deberes y bien común.
Praxis permanente y compromiso activo con el crecimiento de las personas y el desarrollo de grupos sociales más desfavorecidos, desde la vivencia de la COMUNIÓN.
Fuerza y dinamismo interior que permite enfrentar y superar ambientes adversos y/o situaciones que requieren el dominio propio, convirtiendo la propia persona en un DON para la comunidad.
Principio ético cimentado en el discernimiento de lo legítimo, deseable y apetecible para la Comunidad y vivido en coherencia, responsabilidad, honestidad y tolerancia.
Unificación de lo que se piensa, actúa o promueve, siendo quien se es en cualquier lugar, con cualquier persona o circunstancia y desde una conciliación con la ética institucional.
Disposición y ejercicio permanente de interacción interpersonal efectiva, veraz y asertiva que posibilite la solución de conflictos, el trabajo en equipo y el crecimiento de vínculos de amistad.

Principios y Fundamentos que orientan la acción de la comunidad educativa.

La Filosofía del Colegio Teresiano Nuestra Señora de la Candelaria se fundamenta básicamente en el Magisterio de la Iglesia Católica y en las enseñanzas de ENRIQUE DE OSSÓ quien se inspiró en la espiritualidad de Santa Teresa de Jesús. La escuela Teresiana es y realiza una misión de Iglesia. Su ideal educativo es formar a Cristo Jesús en el corazón de las niñas, niños y jóvenes y conseguir que Jesús sea un amigo y compañero permanente en su vida cotidiana.

Promueve la educación Integral de los estudiantes según la concepción católica de la persona haciendo énfasis en cuatro dimensiones: Relacional, volitiva, cognitiva y de trascendencia. “La Educación Teresiana se desarrolla desde un trato recíproco que reconoce la dignidad de todo ser humano y promueve la amistad”. PET (Propuesta Educativa Teresiana)

Los principios más importantes

La mirada educativa de Enrique de Ossó (que le contagiaron Jesús Maestro y Teresa de Jesús), percibe la persona en toda su complejidad, trasciende las apariencias, la trata como “morada de Dios” y le ayuda a descubrir su verdad para que viva conforme a la dignidad que tiene. Por esta razón, la comunidad educativa del Colegio Teresiano está llamada a vivir y testimoniar la prioridad de la persona. Esta fue la opción de Dios Trinidad en la encarnación del Hijo de Dios.
El Dios del cristianismo habita en el ser humano creándolo y recreándolo continuamente. Le invita a vivir una relación de amistad con Él y a tener relaciones humanizadoras con los demás. En este camino, Teresa de Jesús y Enrique de Ossó son los maestros. Ellos aprendieron a ser y a servir desde esta relación de amistad y reconocieron así mismo que, sólo la relación de amor construye, desarrolla, restaura, sana, incluye. La comunidad educativa está llamada a asumir que educa a través del trato personal, en relación (con Dios, con los demás y con el cosmos) y en los lugares donde nos encontremos.
Enrique de Ossó considera una clave importante es formar integralmente a la persona para el cambio social. Para la educación de hoy es un reto que se asume desde la perspectiva de género en la que hombres y mujeres sean reconocidos y valorados como constructores de relaciones basadas en el respeto, la equidad, el reconocimiento y la dignidad.
Teresa de Jesús y Enrique de Ossó se dejaron afectar por las realidades socioculturales en las que vivieron. Ellos asumieron una postura y actuaron desde sus convicciones y valores. Así mismo, la Comunidad Educativa tendrá que acoger la realidad multicultural, descubrir la presencia de Dios en ella y responder comprometidamente desde una visión abierta de la realidad, no sólo local, sino mundial. Además, deberá estar al día con los avances de la ciencia, la tecnología y la pedagogía actuales.
CONOCER Y AMAR: Enrique fundamentó el Sistema Educativo Teresiano en procesos binarios integradores de los dinamismos de la persona: conocer y amar, amor y verdad, entendimiento y voluntad, pensar y sentir, virtud y letras, instrucción y educación, sabiduría y santidad, ciencia y piedad, etc. Se trata de un amor que permite que la verdad profunda de la persona y el cosmos se revele y una vez conocida sea amada. La Educación Teresiana pretende formar personas que conozcan y amen, que vivan lo que afirman, anden en verdad y por ello vivan en proceso de desarrollo continuo.
Pedagógicamente, el Colegio Teresiano fundamenta su tarea educativa en los principios pedagógicos de su fundador, Enrique de Ossó, formulados a lo largo de sus escritos pedagógicos. La razón, el amor y la fe o religión definen, en síntesis, las finalidades, los contenidos y los medios del Proyecto Educativo Teresiano.
Sólo el ejercicio de la inteligencia (pensamiento, consideración, reflexión, razonamiento, deliberación, etc.) promueve el desarrollo de la condición personal: “El niño es un ser racional y debe ser guiado por la razón no por el temor o la imposición. El temor dura poco, la razón siempre. No hagan de los niños repetidores, sino observadores y pensadores”. Por otra parte, ninguna persona conquista una personalidad madura ni el carácter moral si no desarrolla su capacidad de discurrir y juzgar.
La verdadera educación es la que desarrolla a la vez la dimensión moral, intelectual, síquica y física de la persona. El Proyecto Educativo del Colegio Teresiano se inscribe en la tradición pedagógica del humanismo cristiano caracterizada por la integración de fe y cultura. La educación religiosa está en el centro de la educación teresiana.
Es la pedagogía divina, concretamente la pedagogía de la Encarnación del Hijo de Dios. Se educa por el amor porque sólo el amor construye la persona. Educar con amor significa mantener con los estudiantes relaciones en las que puedan descubrirse como valiosas y dignas de ser amadas. “El amor es la llave de los corazones. El rigor y la dureza intimida y aleja”. Razón y amor son los dos brazos para educar en libertad.